Cómo tener una mente a prueba de balas

En estos tiempos tan retadores en los cuales el entorno de negocios es cada vez más competitivo, ya no es suficiente con saber más o hacer mejor, a menudo un factor clave del éxito está en desarrollar destrezas invaluables tales como la resiliencia, que es la habilidad de prosperar a pesar de las dificultades.

Ahora, capacidades como la resiliencia o la dureza mental no son innatas, se desarrollan y se pueden cultivar, y esto es una buena noticia. Y qué mejores maestros en el arte y ciencia de la dureza mental que los SEALS de la Marina Norteamericana, quienes a lo largo de las décadas han desarrollado un entrenamiento tanto físico como psicológico, que los convierte quizás en la unidad élite más “resistente” del planeta.

A continuación 6 “consejos” resumidos magistralmente en un artículo de Charles Chu en el blog de coaching y productividad de Observer.

Técnica #1: Cómase el elefante.

¿Cómo se come un elefante? …un pedazo a la vez.

La idea es, ante una tarea que le parezca imponente por su magnitud o complejidad, divídala en “porciones” fácilmente digeribles, normalmente tareas ejecutables en períodos de 24 horas, y enfóquese en terminarlas. No piense en la totalidad mientras ejecuta la tarea en cuestión, y una vez completada esa porción, concéntrese en completar la siguiente. Este concepto se llama segmentación, y es ampliamente utilizado por triatletas y corredores de ultra maratón para completar un objetivo inmediato, un trecho del camino, evitando que sus mentes se concentren en la larga travesía que tienen aún por recorrer, y así aumentar sus posibilidades de completar la carrera con éxito.

Técnica #2: Visualice el éxito.

La próxima vez que tenga una tarea o evento grande y estresante, visualícese ejecutándolo con éxito. Una buena visualización debe incluir las siguientes áreas:

Ser vívida y detallada. Involucre todos sus sentidos, imagine los detalles, hágala tan real en su mente como sea posible.

Repetición. Haga la visualización una y otra vez, hasta que ocurra de forma automática.

Imágenes positivas. No se imagine fallando. En vez de eso, imagínese repetidamente en un estado de éxito sin esfuerzo.

Imagine las consecuencias. En sus momentos más fuertes, imagine las consecuencias que fallar tendría en sus más allegados. Imagine sus caras cuando escuchen la noticia, y la desazón que esto le produciría a usted.

Técnica #3: Control emocional.

En momentos estresantes el cerebro ordena la secreción de las principales hormonas del estrés – adrenalina, cortisol y norepinefrina – para darnos un empujón de energía y aumentar nuestra concentración. Pero cuando nuestras hormonas del estrés están altas por períodos prolongados, los efectos en la salud física y mental son muy negativos.

La próxima vez que se sienta estresado, pare por un momento lo que está haciendo y realice esta simple técnica que los SEALS llaman 4x4x4:

Inhale por 4 segundos.

Exhale por 4 segundos.

Repita por 4 minutos.

Si la técnica le parece conocida es probablemente porque los yogis la vienen ejecutando por miles de años. La base fisiológica está en que nuestra mente afecta a nuestro cuerpo, y viceversa. Realizar ejercicios sencillos de relajación reduce los niveles de hormonas del estrés y nos prepara para períodos de relajación.

Técnica #4: no-reactividad.

Las personas no se preocupan por las cosas, sino por la interpretación que le dan a las cosas.

No podemos controlar lo que ocurre a nuestro alrededor, pero sí podemos controlar cómo interpretamos lo que nos sucede. Esto se llama reencuadre, e implica seleccionar entre varias interpretaciones de un evento, la que más nos fortalece, una que sea positiva para nosotros.

Tome un rol activo en cómo interpreta los sucesos que le ocurren. Trate de reencuadrar los puntos de vista negativos en puntos de vista positivos. Vea los malos momentos como oportunidades para mejorar.

Técnica #5: Pequeñas victorias.

En momentos en que su ánimo está bajo, piense en cosas pequeñas y simples que le sean agradables. Piense en cosas agradables que le hayan pasado durante el día, por muy sencillas que parezcan, el aire fresco después de una lluvia intensa, el delicioso olor de la taza de café de la mañana, la sonrisa de un ser querido. De esta manera, poco a poco su ánimo mejora, y lo prepara para las grandes victorias por venir.

Técnica #6: Encuentre su “tribu” y su necesidad.

En su libro “Tribu: el regreso a casa y la pertenencia”, el autor Sebastian Junger escribe: “A los seres humanos no les importa la dificultad, de hecho florecen con ella. Lo que les importa es no sentirse necesarios. La sociedad moderna ha perfeccionado el arte de hacer a las personas sentir que no son necesarias. Es momento de que eso termine.”

Los seres humanos somos seres sociales, y buscamos sentido en un mundo que a veces en apariencia no lo tiene.

Encuentre ambos – amigos cercanos y principios cercanos – y tendrá la base de la resiliencia.

Dedique tiempo a pensar en las cosas que le dan sentido a su vida, y acérquese a aquellas personas que comparten su visión y valores.

Esperamos que haya encontrado la información de interés. ¿Tiene alguna técnica personal que pudiera compartir con nosotros? Nos encantaría escucharle.

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